Por Pedro González
En el mundo de la literatura de ciencia ficción, nombres clásicos como Isaac Asimov, Philip K. Dick, Arthur C. Clark u Orson Scott Card son los primeros que vienen a la mente de cualquier aficionado.
También podríamos hablar de otros brillantes en su género, como Ray Bradbury, HG Wells, Robert Heinlein, Frank Herbert, William Gibson o JG Ballard. Y eso, por no hablar de grandes clásicos llenos de talento, como Julio Verne, Mary Shelley, George Orwell, Aldous Huxley o HP Lovecraft.
Pero no, reconociendo el enorme talento todos estos nombres que hemos recordado, y otros actuales, como James SA Corey o George RR Martin, aquí nos interesan dos nombres que, tal vez no son tan conocidos, pero son brillantes en su campo. Hablamos de Stanislaw Lem y Joe Haldeman.
Joe Haldeman y Stanislaw Lem: dos autores de ciencia ficción que merecen ser reconocidos
¿Por qué hablo de estos dos autores? Primero, porque son mis favoritos del género, y me han dado carta blanca para recomendarlos. Así que aprovecho para que cualquier aficionado a la ciencia ficción descubra una perspectiva nueva sobre el género.
Sea como fuere, es muy probable que conozcas, al menos, un libro de cada uno, aquel que le ha dado fama mundial. Por un lado, tenemos a Joe Haldeman, con La guerra interminable. Por otro, Stanislaw Lem escribió Solaris.
Pero ambos autores han escrito mucho, muchísimo, y en condiciones muy diferentes, ya que Haldeman es un veterano de la Guerra del Vietnam, mientras que Lem nació y creció en su Polonia natal bajo el férreo régimen socialista soviético, y todo ello se transcribe en cada novela que ha visto la luz de la mano y pluma de ambos.
Joe Haldeman, el pacifista autor de La guerra interminable
Vamos a comenzar con Haldeman. ¿Qué hace que este autor sea diferente a cuanto conocemos? Sin duda, su pacifismo militante es lo primero que llama la atención, máxime cuando se cultiva un género tradicionalmente guerrero y violento como es la ciencia ficción.
Es curioso que este autor no sea más reconocido a nivel mundial, pues en el género de la ciencia ficción lo ha sido prácticamente todo. No obstante, su historia vital es bastante curiosa. Llamado a filas para participar en la Guerra del Vietnam (fue condecorado con el Corazón Púrpura), marchó poco después de graduarse en Física en 1967 en la especialidad de astronomía por la Universidad de Maryland.
Su formación científica y su experiencia en la guerra, donde fue herido de gravedad por una mina, lo llevó a escribir su primer libro, War Year, donde narraba sus experiencias en el célebre conflicto.
No obstante, sus inquietudes literarias y su salto a la fama llegarían unos años más tarde, cuando publicó en 1975 La guerra interminable, una de las mejores obras de ciencia ficción que se han escrito hasta la fecha.
Desde aquel lejano año hace más de cuatro décadas, Haldeman se ha hecho con importantes galardones, como los prestigiosos premios Hugo, Nébula y Locus. Obviamente, hoy día es un prestigioso novelista de ciencia ficción, además de profesor de redacción y escritura.
Qué leer de la obra de Joe Haldeman
Personalmente, recomendaría toda su extensa obra que abarca casi 50 años de civilización humana vista desde la perspectiva de la ciencia ficción, pero con claro interés en contar lo que pasa hoy en día en nuestro mundo.
Si me tuviera que quedar con tres libros del autor, serían, sin lugar a dudas, La Guerra Interminable, una verdadera obra maestra de la ciencia ficción moderna, Paz Interminable, una especie de continuación no oficial que regresa sobre el tema de la agresividad de las especies, y Viejo Siglo XX, una curiosa reflexión sobre la añoranza que, además, podríamos intercalar dentro de la obra de Haldeman que, al más puro estilo Honoré de Balzac, se pueden considerar todos sus libros como una historia que nunca acaba y que no se entiende si no se observa al completo, aunque cada texto sea independiente del otro.
Stanislaw Lem, un estudioso en la corte de la ciencia ficción
Por otro lado, la carrera profesional de Stanislaw Lem es, si cabe, incluso más interesante que la de Haldeman. Polaco de nacimiento en la actual ciudad ucraniana de Leópolis, vio la luz en 1921 y sufrió los estragos de la Segunda Guerra Mundial desde la resistencia, con la que colaboró como soldador. Él mismo afirmaba con ironía que era tan malo soldando que no le suponía esfuerzo alguno sabotear nada.
Pero lo mejor de Lem estaba por llegar. Vivió la época más dura del comunismo soviético, hecho que se refleja en la evolución de su pensamiento y de su propia literatura, pues se observa un cambio pronunciado en su obra desde sus comienzos literarios hasta sus últimos textos, datados a finales del siglo XX y comienzos del XXI.
Pero, ¿qué decir de este escritor que no se haya dicho ya? Por mi parte, destacaría un detalle que, considero, es manifiesto. Su tono filosófico y sus grandes dosis de sátira encuentran la fama en dos de sus obras más conocidas, Solaris y Ciberíada. Ambas fueron adaptadas a más de 40 idiomas superando los 25 millones de ejemplares vendidos. Incluso tuvieron adaptaciones al cine por la mano de Andrei Tarkovski y Steven Soderbergh.
Qué leer de Stanislaw Lem
Sin embargo, si tuviera que destacar tres novelas del autor, no sería ninguna de ellas. Por mi parte, considero que tiene tres obras que considero magníficas por el tiempo en que están escritas, por su capacidad de inventiva, de uso de la ciencia de la época e incluso por ser relativamente predictivas. Estas serían Astronautas, La fiebre del heno y El Invencible.
Su primera novela, Astronautas, todavía denota ese toque añejo del comunismo del siglo XX como solución de todos los males de la humanidad. Sin embargo, su experiencia alrededor de la idea del primer viaje a Venus es magnífica, pese a que, a nivel científico, fuese bastante desubicada.
El Invencible es un claro ejemplo de ciencia ficción pura en una expedición a un planeta donde los seres humanos no son bienvenidos. Por su parte, La fiebre del heno es un maravilloso ejercicio de encaje de bolillos donde una compleja trama investigadora acaba por ser un perfecto puzle que sorprende a propios y extraños.
¿Te gusta soñar con mundos lejanos sin perder el hilo de la ciencia real y la filosofía y sociología actual? Echa un vistazo a la bibliografía de Lem y Haldeman, no te arrepentirás jamás.
Pedro González lleva años en el mundo del los blogs y las letras. Puedes saber más de él en:
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